Día 157. Quinto día de tentadero
Martes, primer día importante de esta semana. Desde el sábado me están pinchando a las 6 de la mañana y a las 6 de la tarde una medicación que pone mi médula a currar fabricando pequeñas células madre. Efectivamente, como te dije en la última entrada, no estará demasiado contenta porque duele. Duele de manera extraña; duele en algunos lugares y de manera que nunca me habían dolido. Una especie de palpitación interior, que sale de la parte baja de la espalda, el sacro y viaja hacia fuera. No es muy intenso por suerte. Paracetamol y palante. Esta mañana me han puesto la vía venosa central que va directamente a la yugular aunque para mi sorpresa y alivio no va en el cuello sino un poco mas abajo, así que es más cómodo de lo que me esperaba. La “instalación” me la han hecho en UCI y con sedación. Muy divertida la enfermera que me contaba cómo iba a flipar con esa sedación nueva tan agradable, pero no ha conseguido dormirme del todo y he entrado en un momento de sueño lúcido en el que le